El sábado desde temprano se presentó como uno de esos días típicos de marzo, (sereno, soleado y apacible) habíamos acordado con unos cordobeses de Río Cuarto ir por pejerrey en la marea baja, ya que la variada estaba bastante floja y muy variable (hay mareas que se pesca bien y otras que inexplicablemente cuesta muchísimo). Salimos a las 10 de la mañana con rumbo al playón de la Isla Gama. La navegación fue muy tranquila, fondeamos en 1,5 metros de profundidad y no tardaron en aparecer los primeros piques, augurando una buena jornada (sabíamos que hay mucho pejerrey y de buen tamaño), faltaba averiguar si tenían apetito.
Como dije antes enseguida empezaron los primeros piques y se fueron afirmando cada vez mas hasta que comenzaron a clavar los tradicionales dobletes. Los cordobeses (siete ), generaban un debate por cada ejemplar que sacaban, pero al final casi todos acordaron que las líneas mas efectivas son las más sencillas (dos anzuelos chicos, una boyita, y una munición) tipo mojarrera, es que los pejes son muy combativos y al sacarlos del agua enredan todas las líneas si no se tiene cuidado o se utilizan brazoladas largas o muchos "chirimbolos". La carnada también fue motivo de conversaciones inicialmente arrancamos con camarón, pero enseguida hice filete de peje y probaron con las dos, picaban con ambas pero, casi por unanimidad se acordó que el camarón era mas efectivo, aunque a veces lo descarnaban y con el filete no hay ese problema. Hubo uno que hizo la observación que con este último salían mas grandes, pero mas espaciados los piques.
En eso después de una conversación por radio donde confirmaba que se estaba pescando bien, no tardaron en aparecer los primeros "vecinos", pero esta vez no había problema los pejes alcanzaban para todos. El problema era establecer un parámetro en las fotos del tamaño real de los pejes, cosa que solucionamos con una botella que los cordobeses se encargaron de vaciar. Fue algo digno de ver en pleno pique pararon a comer, total los pejes esperaban y después de unos 40 minutos de "picar algo", se reanudó la pesca.
A eso de las 14 horas empecé a tratar de convencerlos de volver a la costa, tarea que no resultó sencilla, ya que algunos querían quedarse todo el día. Después de veinte minutos de charla regresamos con un promedio de 40 piezas por pescador, pero 4 de ellos querían volver, así que les conseguí otra lancha para que pudieran seguir pescando, ya que yo tenía arreglada otra salida. Así que haciendo un pequeño balance final en algo menos de 4 horas, sacaron buena cantidad y tamaño de pejes. Momento para aprovechar para los aficionados a este tipo de pesca. Bueno amigos por ahora eso es todo desde acá de San Blas, saludos y buena pesca
El sábado desde temprano se presentó como uno de esos días típicos de marzo, (sereno, soleado y apacible) habíamos acordado con unos cordobeses de Río Cuarto ir por pejerrey en la marea baja, ya que la variada estaba bastante floja y muy variable (hay mareas que se pesca bien y otras que inexplicablemente cuesta muchísimo). Salimos a las 10 de la mañana con rumbo al playón de la Isla Gama. La navegación fue muy tranquila, fondeamos en 1,5 metros de profundidad y no tardaron en aparecer los primeros piques, augurando una buena jornada (sabíamos que hay mucho pejerrey y de buen tamaño), faltaba averiguar si tenían apetito.
Como dije antes enseguida empezaron los primeros piques y se fueron afirmando cada vez mas hasta que comenzaron a clavar los tradicionales dobletes. Los cordobeses (siete ), generaban un debate por cada ejemplar que sacaban, pero al final casi todos acordaron que las líneas mas efectivas son las más sencillas (dos anzuelos chicos, una boyita, y una munición) tipo mojarrera, es que los pejes son muy combativos y al sacarlos del agua enredan todas las líneas si no se tiene cuidado o se utilizan brazoladas largas o muchos "chirimbolos". La carnada también fue motivo de conversaciones inicialmente arrancamos con camarón, pero enseguida hice filete de peje y probaron con las dos, picaban con ambas pero, casi por unanimidad se acordó que el camarón era mas efectivo, aunque a veces lo descarnaban y con el filete no hay ese problema. Hubo uno que hizo la observación que con este último salían mas grandes, pero mas espaciados los piques.
En eso después de una conversación por radio donde confirmaba que se estaba pescando bien, no tardaron en aparecer los primeros "vecinos", pero esta vez no había problema los pejes alcanzaban para todos. El problema era establecer un parámetro en las fotos del tamaño real de los pejes, cosa que solucionamos con una botella que los cordobeses se encargaron de vaciar. Fue algo digno de ver en pleno pique pararon a comer, total los pejes esperaban y después de unos 40 minutos de "picar algo", se reanudó la pesca.
A eso de las 14 horas empecé a tratar de convencerlos de volver a la costa, tarea que no resultó sencilla, ya que algunos querían quedarse todo el día. Después de veinte minutos de charla regresamos con un promedio de 40 piezas por pescador, pero 4 de ellos querían volver, así que les conseguí otra lancha para que pudieran seguir pescando, ya que yo tenía arreglada otra salida. Así que haciendo un pequeño balance final en algo menos de 4 horas, sacaron buena cantidad y tamaño de pejes. Momento para aprovechar para los aficionados a este tipo de pesca. Bueno amigos por ahora eso es todo desde acá de San Blas, saludos y buena pesca
Nerio Lorenzo - Guía de Pesca en San Blas
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